La señora directora del IES de Ames tiene un serio problema con los números. O no sabe contar, que yo creo que sí, o los maneja alegremente, dándole lo mismo cuatro que cuarenta.
Quizás esta “dislexia numérica” explique el caos con el que empezamos el curso, caos que fue solucionado en gran medida por los propios alumnos, que buscaron soluciones que a ella no se le habían ocurrido, y por algunos profesores, que hicieron grandes esfuerzos personales y de horarios para paliar su mala gestión.
Porque ese es el principal problema del IES, la mala gestión. Suele suceder cuando uno hace la distribución de grupos y los horarios de los profesores antes de que acabe el plazo de matrícula y sin contar cuantos alumnos te vas a encontrar en los desdobles. Mala gestión es también que aparezcan cuatro profesores con dobletes de grupo el mismo día, es decir, dando clase al mismo grupo, de la misma asignatura, dos veces en el mismo día. Y ¿qué cara se nos queda cuando dos profesores llegan a la misma aula a dar clase en la misma hora? Fuimos el centro que antes tenía hechos los horarios, podríamos haber empezado las clases el día 8 de septiembre. Así nos ha ido, que hasta la semana pasada ha habido cambios.
¿Los más perjudicados de este caos organizativo? Los alumnos. ¿Dos alumnos perjudicados? No, muchos más. Es muy cansino repetir hasta la saciedad que los alumnos matriculados en Griego de 2º de BAC, son 5, con nombres y apellidos, número mínimo estipulado por la ley. De nuevo nos ponemos la medalla de ser los únicos, el único instituto de Galicia al que se le ha denegado, ilegalmente, impartir esta materia con cinco alumnos.No se ha permitido a los alumnos de Ciencias Sociales cursar latín, aunque en la mayoría de carreras que estos alumnos pueden cursar, y en algunas titulaciones dobles donde les exigen notas muy altas, el Latín pondera 0,2.En 1º de Bachillerato, en la modalidad de Humanidades, se ha engañado a alumnos y profesores impidiendo al elaborar los horarios que los alumnos puedan elegir Literatura Universal y Griego. No avisaron a los alumnos que habían elegido esa opción, posible según el impreso de matrícula, hasta el primer día de clase y, además se les engañó diciéndoles que la Historia del Mundo Contemporáneo es obligatoria. Al menos 15 alumnos de Cultura Científica vagaban los primeros días por el instituto sin profesor que tuviese la asignatura asignada en su horario. Alumnos procedentes de 3º ESO de PMAR aparecieron matriculados en Matemáticas académicas de 4º, con Física y Química, porque la señora directora ha decidió suprimir el itinerario de enseñanzas aplicadas. Hubo que reformar los horarios de profesores y grupos para paliar esta ilegalidad. Podríamos seguir mencionando casos y veríamos que la suma de alumnos afectados sube mucho de 2 y de 20.
Pero la señora directora se escuda en que los “padres tienen un problema político” ¿Qué quiere decir eso? Claro que si se refiere a “político” con su acepción etimológica de “todo aquello que atañe a la comunidad”, pues sí, la educación de nuestros alumnos y de los hijos, es algo prioritario y de primer orden. Pero me da la sensación de que emplea el término “político” con intención, si no de insultar, si de desprestigiar. Vaya razonamiento más burdo y zafio. Ninguno de mis alumnos cometería ese error. Todos saben lo que era una “polis” y por qué Aristóteles dijo que el hombre es un “animal político”. No sé qué pensarán los políticos que comparten foto con ella, estos, y otros muchos al lado de los que gusta de fotografiarse, de que esta señora esté utilizando una y otra vez este término para degradar a unas personas y unas reclamaciones. De hecho, ya parece una muletilla en su boca. No ha habido entrevista en la radio, periódico o conversación de cafetería o pasillo, en la que el término “político” no haya sido lanzado con intención de desprestigiar a un grupo de padres o profesores que. sólo tienen como objetivo, conseguir una enseñanza de calidad amparada por la ley. Nosotros si que no tenemos ningún otro interés, ni de tipo político, ni económico, ni de un supuesto prestigio social. ni de nada que exceda las cuatro paredes de nuestras aulas. A este grupo con “problemas políticos” solo nos interesa que los alumnos puedan cursar las asignaturas que necesitan para su formación como personas y como futuros profesionales, sin que se vean perjudicados por malas gestiones producidas por ineficacia en el ejercicio de las funciones o por intereses ajenos a lo estrictamente educativo.
Margarita Olivar.